En un hospital de Roma iniciarán las pruebas de una vacuna contra el coronavirus creada y producida en Italia. 5.000 personas respondieron a la convocatoria de voluntarios, pero finalmente serán 90 los seleccionados que serán sometidos al análisis en el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas Lazzaro Spallanzani.
Creada, producida y patentada por la empresa biotecnológica italiana ReiThera Srl y con un financiamiento inicial de cinco millones de euros, ya superó las pruebas preclínicas realizadas tanto in vitro como en animales.
Los primeros resultados pusieron de relieve una fuerte respuesta inmunitaria y un buen perfil de seguridad, informaron las autoridades de la región del Lazio.
A los voluntarios se les inyectará la vacuna y si no se observan efectos adversos significativos pasarán a la siguiente etapa, que comprende una dosis mayor. Los 90 voluntarios elegidos se dividirán en dos grupos de edades, entre 18 y 55 años, y entre 65 y 85 años. Algunos de los voluntarios son médicos, detalle que despertó gran aprobación en las autoridades sanitarias italianas.