Desireé Castro.- La ola de robos que padecen en Puerto Viejo, está perjudicando no solo a sus habitantes, sino a todos los que usan transporte público, pues ha obligado a los choferes a no trabajar de noche.
“Los delincuentes se montan en los autobuses, roban a todos y suben por la montaña que cae en Montemar, por eso los vecinos de La Mansion pedimos que cierren ese paso para que no tengan por donde escapar”, comenta Norka Ponce, vocera del concejo comunal.
Asegura que los autobuses que antes trabajaban hasta las nueve de la noche, ahora solo laboran hasta las seis de la tarde, lo que es un problema tanto para los residentes como para quienes hacen vida en Puerto Viejo.
Quienes lleguen a la parada después de esa hora, deben tomar un taxi, lo que genera un gasto extra; ó tomar un autobús que vaya a rutas vecinas y caminar hasta sus casas, arriesgándose también a ser robados.
Hacen un llamado a Coorpelec para que alumbre la zona, desde el restaurante El Faro hasta la comunidad, para que los delincuentes dejen de asaltar a los autobuses de esta línea. “Pedimos que nos coloquen esa luz con urgencia”, finaliza Ponce. ah