Por presunto lavado de dinero, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue imputada en la justicia por lavado de dinero. La medida contra la exmandataria la decidió el fiscal Guillermo Marijuan, y se conoció ayer por fuentes judiciales, luego de la maratónica declaración del financista Leonardo Fariña.
La imputación se da en el marco de la investigación de presunto lavado de activos a través de la financiera SGI, también conocida como ‘La Rosadita’. El juez decidió además imputar al exministro kirchnerista Julio De Vido y a otras 13 personas que presuntamente habrían cometido este delito.
Fariña mencionó a Néstor y Cristina Kirchner, y vinculó a altos funcionarios del anterior gobierno maniobras de sobreprecios en la obra pública y lavado de dinero, aportando datos de computadoras, teléfonos celulares y archivos que documentan su relación con el manejo de fondos negros del empresario patagónico Lázaro Báez.
El juez de la causa, Sebastián Casanello, dispuso que se lleven a cabo nueve medidas de prueba para determinar si puede usar esos dichos como elementos de cargo contra los demás imputados.
Fariña mencionó el traslado de dinero en bolsos, pero además contó que los vuelos se hacían hasta un aeropuerto uruguayo cercano a Montevideo, donde no hay funcionarios de Aduana, para evitar que revisaran sus pertenencias.
Reconstruyó toda la cadena de la ruta del dinero y explicó cómo era la relación de su constructora con la obra pública, cómo Báez se convirtió en millonario y benefició a los funcionarios. Tuvo diferencias económicas con Báez que lo llevaron a denunciar sus manejos en la televisión. Luego negó sus dichos, pero ya los retomó, profundizó y apuntó a lo más alto del poder en el kirchnerismo./ar