Imputan a 2 Dgcim por tortura y homicidio de Acosta Arévalo
Dos funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar fueron imputados por tortura y homicidio por la muerte del capitán Rafael Acosta Arévalo, ocurrida en junio de 2019, luego de que se desplomó ante un juez cuando lo presentaban, acusado de conspiración por el Gobierno de Venezuela.
El 6 de octubre pasado, el Tribunal Supremo de Justicia había ordenado la reposición del proceso judicial en contra de Ascanio Antonio Tarascio Mejía y Estiben José Zarate Soto. De este modo, el máximo tribunal del país anuló la acusación en contra de los militares que hizo el Ministerio Público, además de suspender todos los actos procesales.
En una sentencia, el TSJ alegó que se observaron varias irregularidades en el proceso: hubo actuaciones que atentaron contra el derecho a la defensa, al debido proceso, a la tutela judicial y a los derechos de la víctima.
Provea manifestó que los dos presuntos autores materiales muy posiblemente actuaron con la orden o complacencia de altas autoridades de la Dgcim. La organización incluso señaló a Vladimir Padrino López, ministro de la Defensa. Por tanto, exigió que se investigue la cadena de mando.
“El asesinato mediante tortura del capitán Acosta Arévalo fue resultado de una estructura criminal que convirtió las violaciones graves a los derechos humanos en una política de Estado, a tal nivel que hay motivos razonables para considerar que se han cometido delitos de lesa humanidad”, finalizó.
La Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, a cargo de la expresidenta chilena Michelle Bachelet, celebró la imputación, que calificó como “pasos en la dirección correcta en la lucha contra la tortura. Alentamos a Venezuela a tomar más medidas para erradicar la tortura y garantizar la rendición de cuentas”.