Las autoridades brasileñas dijeron este domingo que, entre los 14 muertos encontrados en los últimos días en tierra yanomami, en medio de los conflictos entre mineros ilegales e indígenas, había tres ciudadanos venezolanos.
De acuerdo con lo informado por EFE, los cuerpos comenzaron a ser encontrados en medio de la selva el pasado lunes y la investigación apunta a que los muertos fueron producto de enfrentamientos ocurridos desde enero pasado en este territorio indígena, ubicado en la frontera con Venezuela.
Entre los muertos, el Instituto Forense de Boa Vista, capital de Roraima, identificó este domingo a los venezolanos Joel Perdomo, de 68 años, Jenni Rangel, de 28 años, y Johandri Perdomo, de 24 años.
Roraima es la puerta de entrada de la mayor parte de los cerca de 300.000 venezolanos que, en los últimos años, han llegado a Brasil tratando de escapar de la crisis en la que se encuentra sumido su país.
El cuerpo de Jenni Rangel fue encontrado este sábado y, según contaron algunos de sus familiares a medios locales, había llegado a Brasil, al igual que los otros dos venezolanos, hacía poco más de dos años.
Los tres habrían ingresado a tierra yanomami hace más de un año para trabajar en un “garimpo”, como se conoce en Brasil a los campos mineros que, en la mayoría de los casos, como en esa región indígena, traen su actividad de manera ilegal.