Hurtan aire acondicionado e implementos de odontología de ambulatorio

 

*En Santa Eduvigis piden al Gobernador atender el centro urgente

Amy Torres

Cuando el personal de enfermería llegó a primera hora al ambulatorio Omar Zambrano, en Santa Eduvigis, notó con extrañeza que las puertas de los consultorios estuvieran abiertas. Al hacer un breve recorrido su sospecha se tornó real: amigos de lo ajeno habían hecho de las suyas en el centro de salud.

Los sujetos se introdujeron por una de las ventanas, a la que le rompieron las rejas. Se llevaron un aire acondicionado Samsung de 12 BTU, 14 metros de cable y varios equipos de odontología: una fotocuradora, un amalgamador y la lámpara; además de otros enseres.

La denuncia la hace Arelis Martínez, vocera del Comité de Tierras Urbanas (CTU), quien invita a los vecinos a comprometerse con el resguardo de las instalaciones, sino también a la Gobernación.

“Se trata de un servicio óptimo y gratuito que recibimos habitantes de acá y de otros sectores como Vista Caribe, La Aviación, Barrio Aeropuerto, La Torre y Sotavento. Por eso urge que el gobernador Jorge Luis García Carneiro nos garantice la seguridad”.

Explica que han enviado cartas a la Milicia y al Gobierno regional a fin de pedir apoyo permanente. “Esta es la primera vez que nos hurtan este año, pero en los últimos años suman más de tres. No usan el mismo modus operandi; antes entraban por boquetes”.

En el dispensario, donde recibían atención 30 pacientes diarios hasta la 1:00 pm, no retomarán las labores hasta que haya condiciones mínimas de seguridad. Efectivos de Polivargas y de Polimunicipal acudieron al lugar para atender la denuncia.

Acompañada de otras vecinas, Martínez aprovechó de pedir el acondicionamiento de todo el ambulatorio, que tiene más de 15 años funcionando y solo ha recibido pañito de agua tibia. “Hay filtración en techos y paredes, y también necesitamos un tensiómetro, un glucómetro y otro nebulizador”.

Ayer un vecino, que es herrero, se encargó de reforzar las ventanas del recinto a fin de evitar una nueva arremetida del hampa./