La fuerte humedad en el interior de las viviendas afectadas por el deslave del año 1999, en el sector La Pedrera, ha causado problemas de salud a sus ocupantes. “Los baños están tapados y el techo se cae a pedazos”, informó Zenaida Villarreal.
Señaló que está viviendo en una casa prestada. “Tengo ocho años pasando penurias y cuando traté de conectarme a una de las mangueras para surtirme de agua, fui agredida por unos vecinos, por lo que ni ese servicio tengo disponible”.
La casa está en alto riesgo y vive con una hija, quien padece de asma a consecuencia de la humedad en el lugar. “No he recibido ayuda y el consejo comunal nada que se ocupa de estas familias”.
Carmen González informó que también ocupa una vivienda en precarias condiciones y que requiere salir de ese lugar para mejorar sus condiciones de vida.
Afirmó que por su cercanía al río, las casa fueron declaradas no habitables, pero que no hay interés por parte de las autoridades de atender sus demandas.LL/jd