Veintiséis kilómetros en 12 horas será el recorrido que miles de feligreses realizarán este sábado en la peregrinación de la Virgen de Lourdes, tradición institucionalizada por el padre Santiago Machado hace 139 años.
Se estima que este año la participación de peregrinos sea mayor, porque si en la semana pasaban de los 700, en esta oportunidad por ser un día no laborable se esperan unos 2 mil fieles y 4.000 en la misa de clausura.
A las 3:00 am salen los autobuses desde el Banco de Venezuela de Caribe, de la Plaza Bolívar de Catia la Mar y de la Plaza de Lourdes en Maiquetía hasta La Pastora, donde el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Caracas celebrará la eucaristía a las 5:00 am.
Finalizada la misa, comienza el descenso de los peregrinos con la imagen para realizar el Vía Crucis, pues en el camino de los españoles se instalan 14 estaciones en donde recrean la pasión y muerte del Señor Jesús. Durante el trayecto hay cantos y rezo del santo rosario.
“Este peregrinar permite mantener la historia viva de nuestra parroquia y nuestra patria, porque por este camino entraron los primeros pobladores y el comercio hacia el valle de Caracas. Desde el punto de vista religioso, también es importante porque representa un acto de piedad”, manifestó Antonio Pereira, uno de los organizadores.
A las 8:00 am, en la iglesia de Maiquetía, habrá en la gruta de la Virgen un rosario especial con los niños de la Cataquesis y a las 10:00 am la misa por los enfermos. A las 5:00 pm será la recepción de la Virgen en la comunidad de Quenepe y a la 6 de la tarde la misa solemne presidida por monseñor Raúl Biord, obispo de La Guaira, y concelebrada por los sacerdotes de la Diócesis.
La actividad es coordinada por la Iglesia católica bajo la dirección del párroco José Martín Vegas, y vecinos de Maiquetía y de La Pastora, apoyados por las autoridades regionales y municipales.
Una de las tradiciones más duradera
Todo comenzó con un viaje que él realizó al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes en Francia, en el año 1882. Machado sentía que los guaireños necesitaban un refuerzo espiritual ante los duros tiempos que transcurrían y buscó respuestas en Lourdes.
Una vez ahí, se inspiró por la gruta de la Virgen y cuando volvió a Venezuela puso manos a la obra para construir una réplica de la misma. La construcción de la gruta tomó dos años, y Machado contó con la ayuda de los hombres de la comunidad para traer piedras y arena del río Piedra Azul. De hecho, el mismo Machado cargó piedras y coordinó el traslado de una enorme piedra que tuvo que ser cargada por veinte hombres y sirvió como altar para la gruta.
Después de la bendición de la gruta el 8 de febrero de 1884, Machado sintió la necesidad de celebrar una fiesta en honor a la Virgen de Lourdes y para su sorpresa la participación fue masiva, por lo que decidió oficiar esta celebración cada año.
Lo que no esperaba él, ni nadie más dentro del clero, era que la participación del año siguiente iba a ser tres veces más grande y durante ese tiempo no cabía ni un alma en las calles de Maiquetía, Macuto y La Guaira. Los hoteles y restaurantes tenían que albergar a tantos peregrinos como podían, y a veces asignaban hasta cuatro peregrinos por habitación. Machado resolvía la situación de los peregrinos alquilando casas y quintas para que estos se quedaran pero incluso así mucha gente tenía que dormir en las calles.
A partir de ese mismo año, 1885, los caraqueños empezaron a hacer la peregrinación a través del Camino de los Españoles hasta la Iglesia San Sebastián en Maiquetía, y así ha sido hasta nuestros días, convirtiéndose en una de las tradiciones más duradera entre los venezolanos.