Wilmer Martínez Añez.- wmlaverdad@gmail.com.- Rosmar Agredo Salazar (34), madre de dos varones (7) y (11), perdió la vida tras caer de un transporte colectivo cuando unos malhechores intentaron robar a los pasajeros a la altura de Barrio Aeropuerto, Urimare.
Después que el cuerpo cayó del autobús, los delincuentes abandonaron la unidad, mientras que un grupo de personas la trasladaron a un centro clínico, donde llegó sin signo vitales, según la fuente de información.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Andrés Goncalves, activó un dispositivo de búsqueda en las zonas aledañas para dar con los delincuentes y el autobús, pues el conductor no esperó para formular la denuncia y continuó la ruta. “Nosotros nos desplegamos por Barrio Aeropuerto, Cascabeles y Brisas del Aeropuerto. Manejamos algunos presuntos responsables y nos mantendremos trabajando hasta encontrarlos”.
Su familia era su motor y su bastón
Agredo Salazar se desempeñaba como obrera de la Escuela Bolivariana Luis Beltrán Prieto Figueroa, lugar donde la extrañarán desde el más pequeño de los estudiantes hasta la directora del plantel, porque se hacía sentir con todas sus ocurrencias.
La directora, Janeth Mora, comentó que la conocía desde hace dos años, tiempo suficiente para decir que fue una mujer alegre, amigable, entregada, responsable y muy ocurrente. “Los estudiantes se divertían mucho con ella. Le encantaba estar en contacto con los niños”.
Para Luis Elista, el portero de la institución, Rosmar quedará en sus corazones, por la excelente persona que era. “Ella me echaba mucha broma escondiéndome la muleta, tumbándome la gorra y burlándose de mí. Esa gracia es la que más recordaré y quedará en mi mente. Sin duda alguna, aquellos quienes tuvimos la oportunidad de conocerla, no la podremos olvidar”.
Siempre con risas
Para Daryori Martínez, compañera de servicio, ella era como su hermana. “Nosotras estábamos siempre juntas, lo que más recuerdo es que se quedaba dormida y llegábamos tarde al trabajo, pero siempre dispuestas a ayudarnos una a la otra”.
Luchadora y trabajadora
Andrés Varela, cuñado, asegura que era una mujer trabajadora y siempre atenta a las labores del hogar. “Estaba pendiente de su familia y su casa. Sus ganas de vivir fueron arrebatadas y ahora deja a sus dos hijos sin su presencia”./WMA/ep