Génesis Arévalo.- Desde muy temprano, los clientes cuyo terminal de cédula va del cero al cuatro se apostaron a las afueras del Abasto Bicentenario, donde vendieron harina de maíz, leche, café y azúcar.
Tres paquetes de harina de maíz, uno de leche, uno de azúcar refinada, dos de arroz, una mantequilla grande y un kilo de café fue lo que pudieron adquirir los consumidores. Solo algunos lograron comprar café, porque se agotó en pocas horas.
Neveras siguen sin funcionar
La cavas y neveras del establecimiento siguen sin funcionar, lo que imposibilita la existencia de inventario de pollo y la carne los fines de semana.
Una fuente ligada al Abasto, asegura que el sistema de fríos será reparado durante los próximos días. GA/ar