Ante la crisis económico-social prolongada, los venezolanos pagan hasta mil dólares para abordar un peñero que los lleve a las islas del Caribe, arriesgando la vida en mar abierto en estas embarcaciones precarias, denunció Omar de Dios García, coordinador de Fundaredes en Falcón.
Destacó que los viajes se realizan en balsas frágiles y sin techo, destinadas para la pesca, «sin las condiciones mínimas para la navegación y la seguridad de los pasajeros”.
Agregó que los migrantes venezolanos también están expuestos a las redes de tráfico de personas, captados con ofertas de trabajo engañosas, poniendo en peligro su integridad y en muchos casos encontrando la muerte”, indicó.
La madrugada del 11 de marzo fueron detenidos 14 connacionales que iban en un peñero para entrar a Aruba de manera ilegal.
Previo a ello, 18 venezolanos fueron rescatados luego de naufragar en su intento por llegar a Curazao.