Lorena Correa.- En lo que va de año, más de seis veces el hampa ha visitado los kioscos del balneario de Naiguatá, llevándose hasta los alimentos.
Los comerciantes, llenos de temor aseguran que han denunciado la problemática en varias oportunidades, pero aún las autoridades no toman cartas en el asunto. Explican que los hurtos ocurren en la madrugada.
“Nos tienen a pan y agua. La situación actual no da para renovar ningún artefacto eléctrico porque están por las nubes, hacemos el sacrificio de traerlos de nuestras casas y se los llevan. Hay una banda que se está dando a la tarea de ingresar por lo menos una vez al mes a cada kiosco”.
Indicaron que ya han tomado medidas, blindando los comercios por dentro para evitar que se lleven la mercancía. “No dejan pasar nada por alto, hasta los bombillos, le hemos colocado rejas a las lámparas porque de lo contrario dejan el balneario a oscuras. Gracias a Dios en el día no tenemos contratiempos, y los playeros también se van temprano, sin embargo, muchos trabajamos hasta las 8:00 pm y estamos a merced de ser asaltados”.
Piden reforzar la seguridad en la noche
Señalaron que es importante resguardar no solo la integridad de los playeros, sino también intensificar la seguridad para que los comerciantes puedan continuar ofreciendo buenos servicios a los turistas. LC/ar