María Elena Moreno, memlaverdad@gmail.com.- Subiendo como la espuma se encuentra la deuda con los proveedores extranjeros, que según cifras de Caduainco pudieran superar los 12 mil millones de dólares. Con las líneas de crédito cerradas, los importadores están en jaque al igual que el abastecimiento para el cierre del año, así lo expresó Rusvel Gutiérrez, presidente de la cámara.
“Tenemos un registro de 98% de baja en las importaciones. Se han hecho solo dos subastas este año, así no hay país que esté bien. Además han estado asignando, más no liquidando. Por eso ningún proveedor suelta mercancía. Hemos perdido la confianza, que es difícil de recuperar”.
Por falta de materia prima, han ido disminuyendo operatividad las distintas fábricas de los sectores económicos. A nivel industrial, los economistas afirman que hay menos de 20% de producción, lo que mantiene los anaqueles vacíos. “Para diciembre no creo que llegue nada, y esto se ha hecho una costumbre desde hace tres años. Los importadores no se arriesgarán a traer con recursos propios porque no es seguro”.
Mientras tanto, el ciudadano de a pie sobrevive en un país donde la inflación no da tregua. Comprar lo necesario para el regreso a clases fue el último dolor de cabeza que debieron enfrentar. Los precios van hacia arriba y el salario se vuelve sal y agua.
“Es algo insostenible. Diciembre será un mes gris en muchos sentidos. Las utilidades no servirán ni para reparar los electrodomésticos, porque conseguir los repuestos es caro. Eso sin contar que habrá empresas y hasta agencias aduanales que no podrán abrir el próximo año por no tener capital. Se avista nuevamente un cierre en rojo para los aduaneros este 2015”. /MEM/ar