El líder opositor Juan Guaidó, conversó vía telefónica con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. Es el contacto de más alto nivel que ha tenido con la administración del presidente Joe Biden el 20 de enero.
Washington ha insistido en que reconoce a Guaidó como el líder legítimo de Venezuela.
Guaidó y Blinken hablaron sobre la provisión de ayuda humanitaria a Venezuela, así como el suministro de vacunas contra el coronavirus, dijo una de las fuentes que habló bajo condición de anonimato.
Horas después el Departamento de Estado emitió un comunicado en el que detalló: “El secretario Blinken y el presidente interino Guaidó hablaron sobre la urgencia humanitaria en Venezuela que ha forzado a cerca de 5.5 millones de venezolanos a emigrar del país, y el secretario de Estado aplaude los esfuerzos para encontrar soluciones que acaben con su sufrimiento y se compromete a seguir con el apoyo de EEUU”.
Agregó que «Blinken resalta la importancia del retorno a la democracia en Venezuela a través de elecciones libres y justas”.
Por su parte, Guaidó expresó: “Estamos buscando aumentar la presión sobre el régimen, pero también buscar alternativas a la emergencia humanitaria compleja, con el sistema Covax para la vacunación, la atención a los migrantes y la entrada del Programa Mundial de Alimentos».
Antes de la conversación con Blinken, el ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, Marc Garneau, escribió en su cuenta de Twitter que también habló con Guaidó para expresar la “solidaridad de Canadá con el pueblo de Venezuela en su lucha contra la pandemia de covid-19”. Agregó que se mantiene el apoyo “a un retorno pacífico a la democracia en Venezuela”.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo a Reuters el pasado fin de semana que la administración de Biden “no tiene prisa” por levantar las sanciones de Estados Unidos a Venezuela aunque consideraría aliviarlas si Maduro toma medidas que demuestren que está listo para negociar en serio con la oposición.