A pesar de haberse eliminado el sistema de venta por terminal de número de cedula, las colas y trifulcas en el comercio Día a Día de la Calle Nueva, Carlos Soublette, siguen igual, pues las amas de casa continúan haciendo cola para comprar lo poco que llega a este establecimiento.Mireya Marín explicó que la espera comienza desde muy temprano en la mañana, ya que el camión que suministra este supermercado no tiene hora fija de llegada, por lo tanto, las amas de casa pueden pasar todo el día afuera del negocio para adquirir los productos de primera necesidad. Indicó que esperaban que llegara azúcar, café, harina de maíz precocida, pasta y papel higiénico.
Por su parte, Katiuska Yánez, expresó su preocupación ante la crítica situación de escasez, pues al tener la responsabilidad de alimentar a cinco niños, necesita encontrar comida donde sea que se consiga. “Es preocupante la situación que vivimos. De mis hijos, la más grande ya está en el liceo y el más pequeño tiene un año. Con los grandes, la preocupación es por comida, mientras que por el bebé, la angustia está en conseguir pañales, cuando no tengo más opción recurro a los bachaqueros, que venden un paquete carísimo, en Bs. 800”.
Manifestó que trabaja vendiendo café, y que también hace cola para conseguir el insumo que le permite mantener su hogar. MN/ep Foto por Atamaika Izaguirre