No hay tantos problemas por corregir con los Yanquis de Nueva York, al menos según la opinión del manager Aaron Boone y del gerente general Brian Cashman.
Tras la eliminación ante los Rays Tampa Bay en una Serie Divisional de la Liga Americana que requirió el máximo de cinco juegos para dirimirse, los dirigentes de los Yanquis no parecen prever grandes cambios para 2021.
El venezolano Gleyber Torres luce firme como campocorto pese a cierta fragilidad defensiva. El empleo del receptor Gary Sánchez sí estaría en riesgo, tras una tercera temporada consecutiva decepcionante. Pero Se buscaría mejorar la rotación de abridores.
Por segundo año consecutivo, las lesiones asolaron a Nueva York. Pero en la postemporada, la mayoría del plantel estaba sano. Aun así, no pudieron superar la segunda ronda de los playoffs.
Los Yanquis finalizaron segundos de la División Este de la Americana, con una foja de 33-27, siete juegos detrás de Tampa Bay. Cometieron la mayor cantidad de errores en las Grandes Ligas, con 48, y tuvieron su peor porcentaje de fildeo desde 1973.
Sin embargo, barrieron a los Indios de Cleveland en la Serie de Comodines antes de ser eliminados por los Rays. Nueva York no llega a la Serie Mundial desde 2009, cuando la ganó.
Torres cometió nueve errores durante su primera campaña como sucesor a tiempo completo de Didi Gregorius en el campocorto. El caraqueño se quedó a una pifia de la cifra más alta en las Grandes Ligas.
«Pienso que, en cuanto a Gleyber, se está volviendo excelente en su rutina. A fin de cuentas, eso es lo que distingue a los campocortos realmente buenos de los que están en el promedio o debajo de éste», indicó Cashman.