El 6 de octubre, un carguero con 5000 reses compradas por el gobierno se hundió en el río Amazonas. En el suceso buena parte de las reses se ahogaron y hasta la fecha las autoridades brasileñas continúan retirando los cadáveres del lugar.
Los malos olores provenientes del ganado descompuesto llegan a las poblaciones adyacentes y al puerto, donde naufragó la embarcación, según señala una nota de prensa de la compañía Doca do Para (CDP).
La embarcación de bandera libanesa perteneciente a la firma de producción y comercialización de carnes Minerva Foods transportaba el ganado de raza Haidar, adquirida por el gobierno de Venezuela, informaron medios brasileños.
Habitantes de la población de Vila do Conde en Bacarena, estado de Pará, descuartizaron a varias de las reses, después de que el barco se sumergiera. La Capitanía de Puertos de Pará informó que culminarán las investigaciones en los próximos 90 días.