El pasado 5 de abril, Francis Sánchez (38) vivió un hecho traumático luego de que su expareja Freddy Mackenzie (47) ingresara a través de la ventana de su apartamento H-10 del urbanismo Hugo Chávez, Urimare, y se generara una situación de secuestro.
Por este hecho, Mackenzie fue detenido por funcionarios de la Brigada de Respuesta Inmediata (BRI) comandados por el secretario de Seguridad Ciudadana, Andrés Goncalves, en compañía de fiscales del Ministerio Público, quienes negociaron durante 5 horas con el agresor.
Sin embargo, Francis indicó que el martes 6 de junio Mackenzie fue liberado, debido a que el juez aseguró que “no había pruebas suficientes para dejarlo privado de libertad”. Desde ese martes, la mujer ha recibido llamadas telefónicas del sujeto y uno de sus hijos ya ha visto a Mackenzie siguiéndolos.
“Yo tengo miedo, me siento traumatizada, vivo en zozobra. No duermo en mi casa, tengo que ir hasta la vivienda de una amiga, por temor de que él se vuelva a meter en mi apartamento y todavía me falta colocarle las rejas a algunas ventanas.
Ni siquiera se dictó una orden de alejamiento que me proteja en caso de que él se me acerque de nuevo”, explicó Francis. Actualmente, Sánchez está viviendo con sus hijos en el apartamento solo durante el día. La ventana de la cocina tiene rejas nuevas, al igual que la que se encuentra en la sala.
Mientras que las ventanas de las habitaciones están bloqueadas con muebles y la puerta de la vivienda es cerrada con cadenas y candado. Francis indicó que tanto ella como sus hijos han quedado afectados psicológicamente por estos hechos.
Ella ha podido recibir ayuda, pero los niños aún no cuentan con la atención correspondiente. “A mis hijos les ha afectado bastante psicológicamente, sobre todo en la forma de hablar; se hacen sus necesidades encima. Cuando escuchan cualquier ruido y se asustan, dijo.
El llamado que hace Francis Sánchez es al fiscal general, Tarek William Saab, para que tome cartas en este asunto. “Quiero que tome medidas, que no esperen a que me mate, ese hombre es agresivo.
Me dijeron que no hubo suficientes pruebas para que él quedara preso, yo quisiera saber el porqué, si habían pruebas como la bombona, la piedra que usó para romper la ventana, el cuchillo con el que me amenazó y los golpes que me dio.
Los hechos fueron presenciados por los fiscales y los policías que estaban presentes y me salvaron. ¿Qué más pruebas quiere el juez, que me mate?”, exclamó el secuestro desde las 3 de la mañana del miércoles 5 de abril se presentó la situación de secuestro en el apartamento H-10 el edificio 8 del Urbanismo Hugo Chávez donde Freddy Mackenzie ingresó por la ventana al apartamento de Francis Sánchez a quien amenazó con matarla a ella y a sus 2 hijos.
Los vecinos sumamente desesperados por esta situación, alertaron a las autoridades policiales, quienes que acercaron al lugar rápidamente e intentaron negociar con Mackenzie, quien manifestó que solo hablaría con fiscales del Ministerio Público.
Se pudo conocer que Mackenzie amenazó también a los vecinos con hacer explotar una bombona si estos intentaban intervenir en la situación.
Finalmente, los efectivos de la Brigada de Respuesta Inmediata (BRI), comandados por el secretario de Seguridad Ciudadana, Andrés Goncalves, lograron detener al sujeto y trasladarlo hasta Caraballeda, para luego quedar a la orden del Ministerio Público.