Los franceses recuperaron este miércoles parte de la libertad que les arrebató la pandemia, un alivio tras más de 6 meses de duras medidas para contener la expansión del covid-19 en el país.
Con más de 108.000 muertos, Francia es uno de los países europeos más enlutados por el coronavirus, pero la situación sanitaria mejoró tras meses de restricciones y la aceleración de la campaña de vacunación.
Aunque pidió a los franceses mantenerse atentos frente a las variantes del coronavirus, el portavoz del gobierno, Gabriel Attal, se mostró optimista frente a un regreso a la normalidad con la reactivación progresiva y prudente de la actividad económica.
Pese a chubascos intermitentes y temperaturas inusualmente bajas para un mes de mayo, los cafés, bares y restaurantes volvieron a abrir sus terrazas, con limitación de 6 comensales por mesa y aforos reducidos al 50%.
Uno de los primeros en reinaugurar las terrazas fue el jefe de Estado, Emmanuel Macron, que tomó un café con el primer ministro, Jean Castex, en una terraza cerca del Palacio del Elíseo, sede de la presidencia.