* El campeón de la Europa League se define bajo estrictas medidas de seguridad
La final de la Europa League en Estocolmo (2:45pm) entre el Manchester United y el Ajax de Ámsterdam, que se anunciaba como una gran fiesta deportiva, tomó otro tono tras el atentado que afectó a la ciudad inglesa.
La UEFA, órgano de tutela de la competencia, se declaró «golpeada» tras el atentado, pero se mostró tranquilizadora en la víspera de la final en Suecia. La Unión Europea de Fútbol asegura haber «tomado en cuenta» el riesgo terrorista «desde el inicio de los preparativos».
«Nuestros pensamientos están con las víctimas y las familias de las personas afectadas», indicó la UEFA en un comunicado.
El atentado, perpetrado por un hombre que detonó un artefacto explosivo en el Manchester Arena, a la salida de un concierto de la estrella del pop estadounidense, Ariana Grande, causó al menos 22 muertos y 59 heridos, entre ellos muchos menores.
«No existe actualmente ninguna información específica que pueda sugerir que una de las actividades de la final de la Europa League en Estocolmo pueda ser el objetivo de ataques», añadió la instancia europea del fútbol.
Además, añade la UEFA que «varias medidas de seguridad suplementarias se pusieron en marcha tras los ataques de Estocolmo en abril pasado».
Los jugadores del United podrían llevar un brazalete negro esta tarde.
Los hombres de José Mourinho saben que su eventual triunfo tomaría otro relieve tras el atentado. En la final hay más en juego que un título, ya que el vencedor se clasificará para la prestigiosa Liga de Campeones la próxima temporada.
El Ajax, segundo en el campeonato holandés, no necesita ganar para estar en Champions, pero para el United, sexto de la Premier League, es la única vía para disputarla tras una mediocre temporada.