En el área de neonatología del Hospital Dr. José María Vargas, en La Guaira, se pudo constatar que de 5 ventiladores mecánicos que disponen, 3 están dañados y solo 2 funcionan a medias.
El personal indicó que los técnicos tratan de mejorar estos 2 últimos y que en cuanto a las incubadoras solo disponen de 5 operativas, de 11 que posee el hospital.
Se conoció que los repuestos que necesitan estas incubadoras, tales como el sensor y otros, están resguardados en el auditorio y aún no han dado «luz verde» para sacarlos.
Debido al déficit han tenido que reducir la capacidad de atención, aunque hay semanas cuando pueden tener hasta 15 neonatos «y los médicos se ven en la obligación de meter a los recién nacidos en las incubadoras que están inoperativas», dijo un trabajador.
«La unidad aún no tiene aire acondicionado, por tanto, los bebés alojados en los incubadoras dañados no pasan tanto frío. Cuando nos llega un neonato muy prematuro, en condición crítica y está un bebé sano en una incubadora operativa, lo sacamos, la lavamos y metemos al que está en estado crítico. El otro va para alguna incubadora que no está encendida», explicó.
También se han visto obligados a alojar de 2 recién nacidos en una sola incubadora, lo que aumenta el riesgo de infección.
Pocos equipos de protección individual
El personal denunció el cumplimiento con la dotación de equipos de bioseguridad. «Nos están entregando los tapabocas una vez por semana. Tampoco nos están entregando el uniforme completo y por lo regular nos dan batas. El antibacterial se desapareció»./HB/jd