Muchas empresas de alimentos han manifestado que el deber de troquelar el Precio Máximo de Venta al Público, y demás informaciones como las fechas de elaboración y lotes, en los productos, se ha vuelto cuesta arriba debido a las fallas que presentan en varias de sus máquinas.
Averías constantes sin opción de repuestos, es lo que sufren, por lo que deben notificar la falla a los establecimientos comerciales a través de comunicados impresos, en los cuales muchas veces deben informar además la fecha de elaboración y caducidad de los productos.
Alimentos La Trinidad, por ejemplo, ha notificado del inconveniente a muchos clientes, a quienes en el escrito le manifestaron que para las fechas de producción tenían el troquel en reparación y había dificultad para conseguir los repuestos. Conseguir la tinta y demás insumos también es difícil. /MEM/ar