Luis López.- A pesar de los esfuerzos que realiza el gremio de choferes del transporte público, en los últimos meses han tenido que sortear por lo menos dos robos diarios a las unidades y circular con cauchos lisos para garantizar el ingreso diario a la familia.
Ángel González, alias El Gato, con más de 30 años laborando como chofer en la ruta Catia La Mar-Caribe, dijo que los continuos robos a los pasajeros y choferes ocurren en sitios que no tienen vigilancia alguna.
“Los delincuentes se montan en la parada de la Sterling y en minutos se bajan en La Páez. Transcurre el tiempo suficiente para dejar a los pasajeros sin dinero, celulares y prendas. Hasta los choferes somos víctimas de estas acciones”.
Dijo que igual ocurre en la parada de Mare Abajo en dirección a Catia la Mar, donde los antisociales se bajan del vehículo en la pasarela de la aduana aérea después de haber asaltado. “No hay policías cumpliendo con su trabajo”.
Cauchos lisos y pocos ingresos
González informó que los cauchos que distribuye la Proveduría no llegan equitativamente a todas los choferes, porque la demanda es mucha y la oferta mínima. “En el mercado está en Bs. 140 mil, lo que representa un gasto significativo para nuestros ingresos que a diario son muy bajos”.
Explicó que han tenido que sortear las deficiencias con chivas, cuyo precio está en Bs. 50 mil y con una vida útil de un mes aproximadamente.
“Hay que pagarle Bs. 28 mil al dueño del carro y el chofer que trabaja de 6:00 am a 6:00 pm llega a su casa con Bs. 5 mil diarios, sin que disponga de ninguna seguridad social, tantas veces prometida”./jd