La avenida principal, a la altura de la entrada de la urbanización Ezequiel Zamora, es un rosario de huecos lo que origina que a diario, en las horas pico, se genere un colapso cuando los conductores tratan de superar este tramo afectando lo menos posible sus carros.
El constante bote de agua que emana de una tanquilla de aguas servidas, generó que el asfalto se dañara, dijo Ramón Izquierdo, transportista de Ezequiel Zamora.
Señala Enrique Mayora, moto taxista, que hace cuatro meses asfaltaron pero no respetaron los niveles de separación del pavimento y la acera de la parada.
“Ahorita no se nota dónde termina la acera y comienza la calle, lo que representa un riesgo pudiendo generar un accidente. Los choferes creen que ésta es la vía, pero resulta que es la acera”.
Es necesario que se aplique un asfaltado eficiente y que se delimiten las zonas de peatones, dijo Mayora. RMH/jd