Con la instalación de un tribunal presidido por el Cardenal Baltazar Porras e integrado por médicos patólogos, especialistas, y los fiscales jurídicos de la Iglesia, que actúan como testigos forenses, este lunes se realizó el acto formal de exhumación del venerable Dr. José Gregorio Hernández Cisneros, en la iglesia La Candelaria en Caracas.
La ceremonia que coincidió con el 156 aniversario del natalicio del médico de los pobres, contó con la presencia de la niña Yaxury Solórzano, en quien Hernández hizo el milagro de salvarle la vida luego de recibir un disparo con el que se completó el proceso de beatificación.
“No estamos ante un cadáver, sino de un resucitado. Que sirva José Gregorio para acercarnos, unirnos a todos los venezolanos en la búsqueda de la paz y el progreso que queremos absolutamente para todos», expresó el Cardenal.
Los restos de José Gregorio fueron sacados en un cofre de cemento, que fue trasladado en procesión desde la capilla hasta el altar mayor de la iglesia donde le rindieron honores, para que luego el equipo de médicos lo revisará junto a Porras y se cerrará.
El cardenal y arzobispo emérito de Caracas, Jorge Urosa, realizó los honores religiosos al cofre con agua bendita e incienso, al mismo tiempo se trasmitieron varios vídeos que mostraron a los obispos de distintas regiones del país rindieron honores desde sus altares.
Con el himno nacional y el alma llanera se retiró del altar el cofre con los restos de José Gregorio Hernández y se otorgó la indulgencia plenaria a todos los presentes en el acto de exhumación que culminará el
sábado 31 de octubre.
Los especialistas extraerán reliquias denominadas “de primer grado”, que consisten en pequeños fragmentos de huesos, para ser enviadas a cada diócesis y arquidiócesis del país, y a Roma.
El presidente de la Academia Nacional de Medicina, el doctor Enrique López Loyo, explicó que durante el procedimiento verificarán que las lesiones de los huesos concuerden con lo que dice el acta de exhumación del año 1975.
“La caracterización de las piezas lleva a la verificación de su estado físico, la condición de su calcificación y colocar un tratamiento para estabilización ósea y en este caso tratar de reconstruir algunas piezas”.
En el procedimiento que se realizará durante los próximo seis días se colocará una capa de material resistente que ayudará a su conservación final.