A la audiencia del Papa Francisco, que se celebró este miércoles en la Basílica San Pedro en la ciudad del Vaticano, asistieron el arzobispo Metropolitano de Caracas, cardenal Baltazar Porras y monseñor Diego Padrón.
Las autoridades eclesiásticas viajaron a Roma en el marco del Consistorio Cardenalicio que se celebrará el 30 de septiembre, donde monseñor Padrón se consagrará como el séptimo cardenal venezolano.
El arzobispo emérito de Cumaná fue presidente del Episcopado Venezolano durante dos períodos sucesivos, dejando para la historia la impronta de sus convicciones cristianas como hombre de paz y de diálogo, en momentos muy álgidos.
Diego Padrón, con 84 años de edad, ha dejado una huella en la historia reciente de la Iglesia en Venezuela y se destacó por la coherencia de sus convicciones cristianas.
Aunque por su edad no podrá votar en un posible cónclave, su nombramiento como cardenal es un reconocimiento honorífico a su labor en la Iglesia, especialmente la venezolana. Sin duda, es una oportunidad para continuar aportando sus experiencias.