En 27 petros, que calculados hoy en dólares serían 1.625, quieren cobrar los apartamentos de la Urbanización Brisas de Maiquetía, Urimare.
Así lo afirman residentes del lugar, quienes explican que es un monto impagable y que supera sus ingresos.
Desde el año 2015, residentes del urbanismo han venido solicitando la regularización de los apartamentos, en los cuales residen desde hace 12 años, pues no poseen ningún documento que haga constar su pertenencia o adjudicación.
Estas viviendas les fueron entregadas por el fallecido expresidente Hugo Chávez. Para el 2012 se habían valorado en 205 mil bolívares, pero se quedaron esperando para pagarlos, ya que nunca los entes responsables iniciaron el proceso de regularización y pago.
“El presidente Chávez había dado un precio estipulado para los apartamentos porque aquí todos somos damnificados de la vaguada de 2010”, expresa Aide Pérez.
Hace un tiempo, algunos de los habitantes fueron a buscar información al Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (Banavih) y la respuesta que recibieron fue que no estaban registrados en el sistema, desde la torre 1 a la torre 10, situación que, según la viceministra de redes de Hábitat y Vivienda, Yorley Luna, ya está solventada.
Ante esto, el 10 de marzo los habitantes se reunieron con la viceministra Luna para aclarar la situación del cobro de los apartamentos y acordaron que desde el próximo martes se comience con este proceso. Además, Banavih realizará una evaluación socio económica.
“Entendemos que ya los apartamentos no valen lo mismo, aquí todo está devaluado. pero, ¿por qué nos van a cobrar un precio tan excesivo? Fueron ellos los que no vinieron a regularizarnos cuando recién llegamos”, señala Pérez.
Los vecinos no se niegan a pagar sus viviendas, pero exigen que se les considere, ya que “ninguno somos personas pudientes, simplemente somos damnificados y el presidente Chávez nos dignificó con esta vivienda”.
Por otro lado, piden que se les sea entregado prontamente, al menos, una documentación que avale que ellos residen en este lugar, pues temen también ser desalojados. /GP/jd