A los niños que reciben clases en la escuela Eugenio María de Hostos no le están suministrando el Programa de Alimentación Escolar desde el 2016 y ni siquiera les llevan el plato servido, lo que es visto por los representantes como una violación al derecho a la alimentación.
Angimar Fernández, representante, expresa que ese es un plantel bolivariano y debería contar con todos sus servicios, pero la realidad es otra porque la mitad de la institución no tiene luz, limitando el proceso de aprendizaje.
Por su parte Jenny Regalado, integrante de la directiva del Sindicato de Educadores de Vargas (Sitravargas), manifiesta que ese plantel ha sido víctima del hampa en varias oportunidades y en una de esas incursiones los amigos de lo ajeno se llevaron hasta la tubería de cobre de la cocina. “Esta no ha sido repuesta y debería ser la prioridad porque se trata de la comida de los niños”.
Indica que la infraestructura de ese centro educativo presenta graves problemas, “incluso el año pasado se cayó un pedazo de techo de uno de los salones de arriba”. BR/jd