El Manchester City fue el primer equipo, de los llamados 12 fundadores de la Superliga, en dar un paso al costado. Como un efecto dominó, el Tottenham, el Arsenal, el Manchester United y el Liverpool también renunciaron al torneo poco después.
Apenas 48 horas después de anunciar la creación del torneo, el City fue el primero de los seis de Inglaterra que se retiró de una iniciativa que conmocionó al mundo del fútbol. Permanecen en ella Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid, por parte de La Liga de España; e Inter, Milan y Juventus, Milan; desde la Serie A italiana.
En su comunicado oficial los «Citizens» dieron a conocer su decisión sin ahondar en explicaciones. «El Manchester City Football Club puede confirmar que ha promulgado formalmente los procedimientos para retirarse del grupo que desarrolla planes para una Superliga europea».
Horas después, el Tottenham se sumó a la salida del torneo. «Confirmamos que formalmente hemos comenzado los procedimientos para retirarnos del grupo que desarrolla la propuesta de una Superliga de Europa (ESL)».
El Manchester United también fue partidario de retirarse asegurando en un comunicado que tras escuchar a sus seguidores, el gobierno británico y a sus accionistas, decidieron no participar en la Superliga de Europa, reseñó CNN.
A ellos se unió el Liverpool, que anunció que el club «puede confirmar que nuestra participación en los planes propuestos para formar una Superliga europea ha sido descontinuada».
El Arsenal, por su parte, fue el único equipo en pedir disculpas y en reconocer su error al haber participado en la idea de este torneo.
«Como resultado de escucharlos a ustedes y a la comunidad del fútbol en los recientes días, hemos decidido retirarnos de la propuesta de la Superliga. Cometimos un error y nos disculpamos por eso», añadieron.
Según una fuente cercana al club, la dirigencia del Chelsea pasó los últimos dos días discutiendo la situación con sus partes interesadas, la comunidad y los seguidores y decidió que no pueden separarse y unirse a la Superliga si los aficionados no están interesados en ella. «Nunca se ha tratado del dinero».
Añadió que la intención del Chelsea de unirse a la Superliga se basó en el deseo de mejorar el juego, una prioridad para el propietario del club, Roman Abramovich.