Delsa Solórzano rechaza traslado de expolicías porque los pone en riesgo
Los expolicías venezolanos Erasmo Bolívar, Luis Molina y Héctor Rovaín, acusados de ocho de los 19 asesinatos registrados durante los hechos del 11 de abril de 2002, fueron trasladados este viernes de una cárcel militar a la cárcel Fénix De Lara.
Según informó a Efe la abogada de los exfuncionarios, Theresly Malave, los policías, condenados a 30 años de prisión, tienen 18 años privados de libertad y esperaban fórmulas alternativas del cumplimento de la pena por buena conducta y trabajo durante la condena.
La abogada se enteró del traslado, según explicó, de manera extraoficial, pese a que hace dos meses, el caso fue entregado a un defensor público para que se revisara la pena cumplida, hasta el momento, y se evaluaran otras medidas alternativas de cumplimiento.
“Tienen esa pena redimida, pero aún así, si no les quieren valer lo que llaman redención judicial de la pena por trabajo y estudio (…) tienen 18 años y suman 9 años más por trabajo”.
La exdiputada opositora Delsa Solórzano se pronunció en torno a este hecho y aseguró que el traslado de los expolicías los sitúa «lejos de sus familias y arriesgando sus vidas»;por lo que instó a organismos internacionales de derechos humanos a ejercer acciones.
“Urge acción de ONU, ONU en Venezuela, UN Human Rights y la misión de Michelle Bachelet que se encuentra en Venezuela. Continuar esperando que el régimen violador de DDHH atienda las alertas, sin acción inmediata pone en peligro la vida de los privados de libertad”.