El cese de operaciones en el país de la multinacional dejó sin señal a alrededor de 2.200.000 subscriptores, la mayoría de los cuales se quedan sin opciones por vivir en zonas a las que no llega la televisión por cable.
Entrevistado por El Nacional, William Peña, periodista especializado en telecomunicaciones y tecnología, detalló: «El mayor impacto será en la población que menos posibilidades tiene, sobre todo en zonas populares, en barriadas como Petare. No había televisión para ellos porque es muy difícil lanzar el cable de conexión directa al hogar. La solución fue la televisión satelital. Ahora deben buscar otro operador y el único que queda es Inter, pero no tiene la capacidad para sumarlos a todos si no tiene inversión».
Peña explica que acceder a la señal de Colombia de Directv no es posible, pues la empresa podría tener problemas legales. La única forma es obteniendo equipos colombianos y afiliarse a ese servicio, pero también es complicado: «Necesitarías un decodificador de Colombia, instalarlo y adecuar la antena de acuerdo a tu geolocalización. Es más factible en la frontera, pero en Caracas no tanto. Y el servicio lo tienes que pagar en pesos, que son alrededor de $ 20 mensuales. No todos tendrán acceso».