Indignados se encuentran los habitantes y conductores de la parroquia Caraballeda por el bote de aguas servidas ubicada en la entrada de Los Corales.
Señalan que Hidrocapital no atiende los reportes realizados por ellos desde hace más de un mes.
Indican que los conductores que pasan a diario por dicha vía extienden las aguas servida por el lugar, “por lo que la insalubridad y el hedor afecta toda la comunidad”, expresa Williams Izaguirre, conductor de la línea Los Corales- Valle del Pino.
Comenta que la comunidad está en riesgo, por lo que “necesitamos acción por parte de la Gobernación o tomaremos la decisión de cerrar la entrada. Cada vez es más repugnante pasar por el lugar, ya que el hedor es insoportable”.
“Los vehículos no van a dejar de pasar por aquí. Nadie se hace responsable de los vecinos enfermos por infecciones respiratorias y de piel”.
Añade que esta agua también perjudica la latonería de carro. “Pareciera que a Hidrocapital no le importara la situación en que se encuentra la población del litoral, pues en cada esquina del estado hay una cañería rebozada debido la falta de mantenimiento”.RR/jd