Beatriz Rodríguez
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Traer productos para la temporada navideña representa un dolor de cabeza para los importadores privados, quienes están afectados por los impactos que ha tenido la pandemia sobre la economía, el alto costo de los fletes para la carga tanto aérea como marítima, aunado a los trámites engorrosos para la trasportación de la mercancía.
Así lo manifiesta Rusvel Gutiérrez, presidente de Caduainco, quien resalta que la zafra navideña está en pico de zamuro y las importaciones continúan en caída libre. “El Gobierno es el gran importador y trae sus productos para los bodegones, son muy pocos los trabajadores que pueden comprar en estos negocios, ya que la mayoría devenga un salario de Bs. 10 millones».
Indica que mover la carga implica costos muy elevados que influyen en el valor final del producto. “Al hacer la estructura de costos se escapa la posibilidad de hacer cálculos precisos para no afectar el maltratado bolsillo de los venezolanos».
Recuerda que hace 2 años un contenedor de 20 pies desde China a Venezuela tenía un valor de $2.500, ahora la misma carga sobrepasa los $20 mil.
Añade que los importadores tienen fe y esperanza en un cambio del modelo económico.