“No es posible que desde el terminal de La Guaira los choferes te cobren la tarifa establecida que son Bs. 15.000 y en Gato Negro quieran hacer de las suyas cada vez que no hay efectivos policiales cerca”, expresó Marina Echarry, quien agregó que ha llegado a pagar hasta 30.000 para bajar.
Aseguró que han llegado al abuso de no hacerle caso a los funcionarios de la Guardia Nacional que se encuentran destacados en la zona, pues según ellos el nuevo pasaje no es suficiente para poder atender las fallas de sus vehículos.
Echarry le hizo un llamado al presidente de la línea Malavé Villalba para que ponga en cintura a estos infractores que cobran sobreprecio cada vez que se encuentran sin supervisión.
“Su ruta es desde Capitolio y cuando están en otra parada pretenden cobrar un pasaje diferente cada día”. RR/jd