«Este martes se trabajó normal y no hubo parada en la mañana como la del viernes que estuvo feo. De los que despidieron el lunes no se dijo nada. El sindicato no metió la mano por estos padres de familia», expresó uno de los trabajadores.
Señaló que los reclamos son justos y una de las prioridades es mejorar los ingresos de los trabajadores, pues «gente con hambre o mal alimentada no rinde». Afirmó que tarde o temprano la empresa constructora Neninca y el fulano sindicato, «tendrán que revisarse porque la molestia es general».
Reiteró que en los últimos días ha ingresado poco personal, por lo que es «imposible que con esta cantidad de trabajadores se avance rápido en estas estructuras del Sheraton y Meliá, que necesitan al menos obreros en dos turnos».LL/jd