Quebradas están las empresas en manos del Gobierno, que en la última década ha expropiado más de 900 industrias según cifras de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria). Solo en el 2011 pasaron a manos del Estado 401 compañías. Estas intervenciones, lejos de garantizar el abastecimiento han sepultado la producción nacional y fomentado las importaciones exageradas.
“Nos hemos vuelto 100% dependientes de las importaciones y se aniquilaron las exportaciones. Las empresas en manos del Gobierno están quebradas, no producen absolutamente nada y eso ayuda en un porcentaje elevado al desabastecimiento. Nada más con la harina de maíz la caída es significativa. Y no es solo con los alimentos sino con todo, con el cemento, el acero, todo”, manifiesta José Guerra.
Insiste en que esta baja de actividad ha acentuado la escasez y cada día se suman nuevos rubros a la lista, pues se paralizan más empresas. Por ejemplo, el café Fama de América, que es del Gobierno, llega una vez a la cuaresma a los negocios y en despachos reducidos. Similar pasa con azúcar, leche en polvo, aceite y demás artículos de producción pública.
Los especialistas explican que al no poder operar en su totalidad para cubrir la demanda interna, el Gobierno ha importado el máximo en alimentos e implementado estrategias como la de redireccionar la producción privada al abastecimiento de los módulos y puntos de venta de la red pública. “Deben entender que hay que fomentar la producción. No pueden abarcar todos los sectores, expropiaron esas empresas para nada”.
Destacan que el Gobierno no sabe producir pues no está dentro de sus obligaciones desde el principio de la historia. Comentan el dicho “Zapatero a su zapato”, y sugieren se hagan enlaces con el sector privado para reactivar el aparato productor./ar