Funcionarios del Cicpc esclarecieron que el robo fue móvil del homicidio de Mercedes Herrera de 40 años, ocurrido el lunes 30 de septiembre en la Quinta Madrigal, ubicada en la transversal 10 y la avenida San Juan Bosco de Altamira.
Por el hecho está detenida Frenyerlin Carolina Ortiz, quien tenía meses trabajando como doméstica ocasional en la vivienda de la periodista.
Las pesquisas también determinaron que meses previos al hecho que la doméstica había traído a su novio, quien se encuentra fuga de nombre Neiker, para qué hicieron los trabajos de jardinería en la vivienda. Desde ese momento los dos delincuentes empezaron a planificar el robo.
La oportunidad se les presentó el lunes, 30 de septiembre, cuando la comunicadora llama a Frenyerlin y le dice que vaya a limpiar el inmueble.
La doméstica llega a la quinta y empieza a ejecutar el plan: Deja una puerta de servicio abierta a un costado para que su novio puede ingresar sin ser visto y cometer el robo.
El sujeto una vez en el interior de la quinta aprovecha un descuido de Mercedes para someterla y las ata de manos, luego junto Frenyerlin le preguntan dónde tiene el dinero y Herrera le dice que tiene 1.000 dólares en efectivo en una gaveta.
La pareja agarró el dinero en efectivo y varios accesorios de valor. Luego, el Neiker le dice a Frenyerlin que tenían que asesinar a la periodista porque ella los conocía y, entonces, con infinita crueldad le amarraron una bolsa en la cabeza con mecatillo.
Mercedes Herrera estaba maniatada y no podía hacer nada para quitarse la bolsa, condenándola a una muerte lenta y desesperada. Luego llevaron el cuerpo hasta el cuarto de visita donde la cubrieron con bolsas y sábanas y huyeron.
Los dos asesinos salieron dejando la casa sin mayores detalles, como para no llamar la atención de algún vecino. Pero, cuando escapaban el teléfono de Mercedes se les cayó en la camioneta de transporte público, y como estaban mul alterados por el crimen cometido, no se dieron cuenta de que se les había caído.
Otro pasajero lo recogió y atendió la llamada que hicieron los familiares de la comunicadora social, y cuando dijo dónde lo había encontrado se encendieron las alarmas: Algo malo está pasando y formularon la denuncia que puso en marcha a las autoridades.