Doriana León, dorianaleon@gmail.com.- Mucho peligro corren las jóvenes menores de 18 años que salen embarazadas. Así lo aseguran los especialistas gineco-obstetricia en el estado, quienes invitan a las muchachas a sumarse al programa de Planificación Familiar que se mantiene en los ambulatorios y el Materno Infantil de Macuto, para evitar los embarazos no deseados.
El doctor Daniel Márquez Pinto, gineco-obstetra del centro, explica que en su consulta atienden a jóvenes desde los 11 años de edad. “Deben acudir con un representante, no necesariamente tiene que ser la madre o el padre, pero sí alguien mayor que no sea la pareja”.
Dijo que los embarazos en adolescentes son tratados como de alto riesgo, “pues la parte hormonal o fisiológica de la paciente está preparada, pero la anatómica no. Estas muchachas pueden concebir, ya que apenas comienzan a menstruar desarrollan la ovulación dada por el ovario; pero su cuerpo no está adecuado para parir, la pelvis es muy estrecha y el aparato reproductor no está completamente maduro”.
Entre los riesgos que corren las jovencitas embarazadas está la posibilidad de presentar una toxemia o preeclampsia, que se presenta cuando la mujer registra hipertensión arterial o proteína en la orina. “La mayoría presenta tensión y retención de líquidos, aumentando la inflamación corporal. También se registra un alto riesgo de generar daño hepático a nivel del feto”.
Indicó que la mayoría de las adolescentes embarazadas tienen problemas de nutrición, afectando directamente al bebé. “El control prenatal desde el primer mes es fundamental, y para ello se deben acudir a los especialistas en obstetricia, pues en las consultas de medicina general no se realizan las evaluaciones completas a la madre y al feto”.
Señaló que en la consulta de planificación familiar, todas las pacientes adolescentes y no adolescentes que hayan parido se les coloca el Dispositivo Intrauterino (DIU) para prevenir embarazos e infecciones vaginales. Al resto, se les recetan anticonceptivos orales e inyectables controlados de acuerdo a las condiciones físicas de los pacientes, que sólo son entregados siempre y cuando estén inscritas en el programa de Planificación Familiar. En la maternidad de Macuto, garantizan la colocación del implante subdérmico, si las pacientes llevan el dispositivo.
Especialistas en el área psicológica y social resaltan que “las complicaciones bio-psico-sociales generadas por un embarazo precoz, se traducen en la deserción escolar, nacimiento de niños con bajo peso y alto riesgo de la joven por el sólo hecho de ser menor de edad; aunque tenga apoyo económico y sea saludable, es un cuerpo en pleno proceso de crecimiento y amerita especial atención”./DLR/ep