Por: Beatriz Rodríguez // brlaverdad@gmail.com
“Los trabajadores eléctricos están sumidos en la pobreza y sin ningún tipo de seguridad social. Viven en una encrucijada, como toda la fuerza laboral del país, con un salario mísero, una inflación que golpea fuerte y sin poder de compra”, indicó Domingo González, secretario de Organización del Sindicato de Trabajadores Eléctricos.
Subrayó que para este 1º de Mayo esperan un aumento suficiente, como lo indica el artículo 91 de la Constitución Nacional, equiparado a la canasta alimentaria que sobrepasa los 500 dólares mensuales.
Resaltó que la CTV y otras organizaciones se han quedado cortas, porque están solicitando un incremento salarial de 200 dólares.
“Nuestros beneficios contractuales han sido conculcados, la contratación colectiva está engavetada y cada vez retrocedemos más, por lo que las autoridades de Corpoelec están llamadas a mejorar su recurso humano, que es lo más importante de una empresa”.
Expresó que coloquialmente se están comiendo un cable, al igual que todos los trabajadores del país, quienes están pasando la peor hambruna de la región.
Carecen de un HCM y un servicio funerario adaptados a la realidad económica del país, no tienen uniformes ni cuentan con los equipos certificados necesarios para un trabajo que es de alto riesgo, además les eliminaron los comedores.
Advierte que el sistema eléctrico está por el piso porque “no se le ha hecho el debido mantenimiento ni a las centrales hidroeléctricas, ni a las plantas termoeléctricas”. Tal es el caso de Tacoa y Planta Centro, que hoy funcionan al mínimo de su capacidad instalada.
Añadió que han realizado asambleas, paros escalonados y la situación continúa igual “porque aquí se violan todos los convenios laborales”./jd