* Extendió a 37 su racha de partidos embasándose
Galvis Guzmán
El Torito Odúbel Herrera ha tenido un arranque inédito en esta temporada 2018, su cuarto año con los Filis de Filadelfia, y según los entendidos del béisbol será su mejor año desde que está en las mayores.
Luego de su destacada actuación este lunes cuando sacudió dos cuadrangulares por segunda ocasión este año y remolcó 5 carreras (tope personal en esta campaña), en la victoria de Filadelfia ante los Gigantes de San Francisco 11-0, extendió a 36 su racha de partidos embasándose, la más prolongada para un jugador de los Filis desde 2006, aunque esta se abrió a 37 porque ayer dio otro imparable ante Gigantes.
El Torito, quien ha llegado a salvo en cada uno de sus 32 partidos en 2018, es dueño de la cadena más larga para un jugador de los cuáqueros en la era moderna (a partir de 1900) para iniciar una temporada, eclipsando el récord de 26 que había establecido Jayson Werth en 2010, de acuerdo con Elias Sports Bureau. La seguidilla del venezolano es la más prolongada en el inicio de una zafra de las Grandes Ligas desde que Matt Holliday consiguió una de 45 desafíos en 2015, con los Cardenales de San Luis.
Antes que Herrera, Chase Utley alcanzó al menos una almohadilla en 35 desafíos seguidos para los Filis, entre el 23 de junio y el 3 de agosto de 2006, mientras que a partir de 2000 el registro pertenece a Bob Abreu, con 48. Una cadena, que además es el tope para criollos en la Gran Carpa.
Según Baseball Reference, Herrera es el bateador 19 de los Filis con una racha de ese calibre desde 1908. El récord absoluto está en manos de Mike Schmidt, miembro del Salón de la Fama, con 56 partidos.
Por otra parte, el outfielder zuliano sumó el domingo pasado un par de dobles que fueron significativos para su historial. Su primer biangular fue el hit 500 de su carrera, en su partido 476, la menor cantidad de encuentros para ese total de imparables desde que Chase Utley lo hizo en 474 desafíos, el 5 de mayo de 2007, según Elias Sports Bureau. Mientras que el segundo estacazo fue el doble 100 desde que debutó en las Grandes Ligas en 2015.
Además, hay que agregar que está entre los dos primeros lugares de los mejores bateadores de la Liga Nacional, peleando con Nick Markakis de los Bravos de Atlanta. Completa, sin incluir el juego de anoche, su línea ofensiva con .401 de porcentaje de embasado, .537 de slugging y .938 de OBP, mientras que proyecta terminar 2018 con 25 jonrones y 95 producidas./jd