“La responsabilidad de la crisis humanitaria en Venezuela radica directamente en las políticas fallidas y los abusos del régimen de Maduro. En septiembre, la Misión Independiente de Investigación de las Naciones Unidas sobre Venezuela documentó que desde 2014, mucho antes de que la actual OEA y el liderazgo estadounidense asumieran el cargo, las autoridades venezolanas bajo Maduro han cometido graves violaciones de derechos humanos y crímenes en violación del derecho internacional, incluidos los extrajudiciales. Ejecuciones, torturas, detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza”, señaló el embajador de Estados Unidos en Trinidad y Tobago, Joseph N. Mondello.
Así reaccionó el diplomático a las declaraciones del primer ministro trinitario, Keith Rowley, quien aseguró que se ha “declarado la guerra a Trinidad y Tobago por tener la temeridad de no haberse unido a Elliott Abrams y al presidente Trump para forzar un cambio de régimen violento en Venezuela”.
Mondello manifestó que “la incompetencia económica del régimen de Maduro ha llevado a un país que alguna vez fue próspero y rico en recursos, a la pobreza y la confusión. Muchos culpan a las sanciones, pero la economía venezolana estaba en caída libre mucho antes de que Estados Unidos comenzara a imponer sanciones en agosto de 2017 y la Unión Europea en noviembre de 2017″.
Enfatizó que “es Maduro y sus partidarios, no las sanciones, quienes tienen la culpa de los millones de venezolanos que viven en condiciones económicas nefastas y que han huido de sus hogares desde que asumió el poder”.
En este sentido, resaltó que “hasta que el pueblo venezolano disponga de elecciones libres y justas bajo la atenta mirada de respetables observadores internacionales, el status quo continuará. Los refugiados, las armas, las pandillas y las drogas que se originan en Venezuela continuarán plagando la región hasta que la democracia regrese al pueblo venezolano”.
Finalmente, manifestó su disposición de seguir trabajando con Trinidad y Tobago para ayudar a mitigar las consecuencias de esta crisis.
“Esperamos el día en que los venezolanos se sientan lo suficientemente seguros como para regresar a casa y reconstruir su país en lugar de buscar refugio en otro lugar”, concluyó el embajador.