“Estados Unidos entregará otros 240 millones de dólares en ayuda humanitaria bilateral para ayudar a recibir y atender las necesidades de los inmigrantes y de los refugiados de la región”, expresó el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
Hizo público su anuncio durante una reunión sobre migración paralela a la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos, en Lima.
Blinken detalló que estos recursos se destinarán a servicios de salud, de refugio y de educación, aunque también a reforzar las fronteras y la persecución de traficantes de personas. “Este apoyo ayudará a las comunidades de acogida a integrar mejor a la población migrante”, dijo.
El secretario de Estado estadounidense hizo un llamamiento también a trabajar juntos para atender las causas de raíz de la migración, entre las que citó la inseguridad, la falta de oportunidades económicas, la crisis climática y la corrupción en la región. “Ninguno de nosotros puede atender solo este reto. Pero podremos si trabajamos todos juntos”, reivindicó.