* “Al Ipasme no le llegan los recursos y la póliza de Sisvar solo cubre hasta Bs. 250.000”, asegura Jenny Regalado, dirigente de Sitravargas
Beatriz rodríguez
“Son 3.500 docentes quienes hoy se encuentran desamparados y abogan por una atención médica de calidad, porque a pesar de los descuentos que les hacen por concepto de salud, cuando se enferman terminan ruleteados por los centros de atención pública”, explica la profesora Jenny Regalado.
Destaca que en el caso del área de odontología del Ipasme, está funcionando a media máquina y para colmo de males el aire acondicionado se dañó, lo que pone cuesta arriba la atención.
En Radiología no cuentan con el material necesario y solo están atendiendo estrictas emergencias, mientras que laboratorio solo realizan los exámenes de rutina.
Sostiene que el director del Ipasme en Vargas, José Gregorio Guzmán, y quienes laboran en el lugar hacen serios esfuerzos para ofrecer la debida atención, pero de la región central no los están abasteciendo.
Recuerda que el instituto no cuenta con una sede propia. “Hace 4 años se planteó la compra de un edificio en Catia la Mar, pero eso quedó en veremos”.
Clínicas se espantan cuando llegan afiliados del Sisvar
La situación es grave porque la póliza de Sistema de Salud de Vargas solo cubre hasta Bs. 250.000 y eso no alcanza ni para una consulta, además son muy pocas las clínicas que aceptan a los pacientes afiliados a esa red.
Resalta que ante esta situación el docente o su familiar que se enferme termina en algún hospital público. “Estamos a la deriva sin ningún tipo de seguridad y es por ello que pedimos atención digna”.
Expresa que el Gobernador debe reunirse con los trabajadores de la educación y conocer de primera mano las necesidades del gremio, sobre todo en materia de salud./jd