Beatriz Rodríguez
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Con el II Contrato Colectivo vencido y una deuda que alcanza el 600% por los aumentos y sus incidencias, los educadores cierran el año escolar con salarios de hambre, indicó el profesor Raúl Yemiñame, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza.
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Resalta que este año escolar ha sido nefasto al no cumplir con los objetivos educativos y al no lograr la cancelación de los beneficios contractuales.
Indica que la situación laboral de los educadores se ha agravado pues la mayoría gana salario mínimo y eso solo alcanza para comprar dos alimentos de la canasta alimentaria.
“Antes un maestro ganaba hasta 16 salarios mínimos. Ahora ganan uno y súper devaluado por lo que tienen que dedicarse a otros oficios para subsistir”.
Asevera que no gozan de ningún beneficio ya que no les venden ni los combos proteicos ni las bolsas. “Estamos en completo estado de indefensión y no tenemos apoyo del Ministerio de Educación ni de la Gobernación”.
En cuanto a la educación a distancia, señala: “Esto ha sido un fraude y una improvisación del Gobierno, ya que en el país las telecomunicaciones son un karma al igual que los servicios, empezando por la luz que se va a cada rato”.