Al menos 37 personas murieron y decenas más resultaron heridas en dos atentados suicidas perpetrados el jueves en un transitado distrito del sur de Beirut, bastión del movimiento chií Hezbollah, informó el ministro del Interior de Líbano.
Las explosiones ocurrieron de forma casi simultánea y afectaron a un centro de la comunidad chií y a una panadería cercana en la zona comercial y residencial de Borj al-Barajneh, dijeron fuentes de seguridad.
El ministro del Interior, Nouhad Machnouk, afirmó que los atacantes llegaron a pie al lugar vestidos con chalecos explosivos. Agregó que un tercer suicida murió alcanzado por uno de los estallidos.
Los atentados, que ocurrieron también cerca de un hospital estrechamente vigilado por Hezbollah, fueron los primeros en más de un año en el bastión del grupo militante respaldado por Irán, que tiene a varios de sus combatientes luchando en Siria junto a las fuerzas del presidente, Bashar al-Assad, en la guerra civil que asola al país.
Los médicos se apresuraron a atender a los heridos tras las explosiones, que dañaron las fachadas de los comercios próximos y dejaron las calles llenas de sangre y cristales rotos.
El Ejército estableció puntos de control en todos los accesos a los barrios sureños de Beirut y la propia fuerza de seguridad de Hezbollah estaba en alerta máxima.