La policía de París detuvo a 148 personas en los disturbios protagonizados por aficionados del París Saint Germain, que destruyeron carros y ventanas de comercios tras la derrota del club en la final de la Liga de Campeones en Lisboa.
Cientos de hinchas fueron multados por no usar mascarillas. La alcaldía instó a los aficionados a que se sometan a pruebas del coronavirus, en medio de un repunte de los casos en Francia.
El PSG tenía la ilusión de consagrarse por primera vez en la máxima competencia de clubes de Europa, pero perdió 1-0 ante el Bayern Múnich.
La policía irrumpió en un bar cercano a los Campos Elíseos para sacar a la fuerza a los presentes que no portaban mascarillas o no cumplían con las medidas de distanciamiento social. También empleó gas lacrimógeno para dispersar a los aficionados que se reunieron en las afueras del estadio del club parisino.
El PSG transmitió el partido en dos pantallas gigantes en el Parque de los Príncipes, con 50.000 aficionados en el interior para cumplir con el máximo permitido dentro del protocolo para evitar la propagación del virus.