Deudos denunciaron profanación de tumbas y desidia en el cementerio

 

* Les pagan a jóvenes ajenos al recinto para que mantengan y cuiden las lápidas

Cansados de la profanación de las tumbas, hurtos y la desidia generalizada de quienes administran el Cementerio Municipal de Pariata, los deudos optaron por pagarle a unos jóvenes con el fin de que les cuiden el lugar donde descansan sus familiares.

Tibisay Tovar denunció que hay quienes “profanan las tumbas para llevarse la cabeza de los muertos o los fémures, y algunos empleados se prestan para apañar esta sinvergüenzura”.

Manifestó que junto a otros deudos denunciaron la situación ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), pero los efectivos aún no han actuado.

Indicó que nadie da una explicación del porqué no limpiaron el cementerio la semana pasada para que ayer estuviera en las mejores condiciones posibles. “A los muchachos que les pagamos hacen un mejor trabajo cuidando y manteniendo las lápidas, deberían ponerlos en nómina para que hagan la labor que no hacen los empleados”.

El agua debe traerla el visitante

 Destacó que hace dos años Hidrocapital realizó un trabajo en las afueras del cementerio y lo dejó sin el suministro de agua, por lo que la gente tiene que llevarla desde sus casas para poder ponerle a las flores y limpiar las tumbas. De lo contrario tienen que comprarla a quienes la venden en la entrada.

“El administrador no hace nada. Si no sirve, ¿por qué no lo cambian o se va? Además todos los cementerios del estado están en las mismas pésimas condiciones. A lo que le pone la mano este gobierno lo daña”.

Otros vecinos afirmaron que han encontrado velas y otros implementos propios de la brujería sobre las lápidas. “Si agarramos a alguien en esas prácticas, lo vamos a linchar”.

Se conoció que el cementerio lo cierran a las 3:00 pm por la inseguridad.

Baja afluencia y pocas ventas

 Este año, la afluencia de dolientes ha disminuido considerablemente, lo que ha influido en las ventas de flores, señaló Angely Pérez, vendedora los sábados y domingos en la puerta del cementerio.

Apuntó que ha vendido una cuarta parte de lo que expendía en años anteriores. “Antes traía 100 paquetes de rosas y hoy solo compré 10”.

Los precios de los ramos estaban desde Bs. 2.000 hasta Bs. 4.000. “Las flores las traigo de Galipán, Los Teques, mientras que hay unos hechos con rosas traídas desde Mérida, las cuales compro en el cementerio de Caracas, y cuestan Bs. 5.000”.

Agregó que “muchos visitantes se molestan porque por cada aumento de sueldo hay que incrementar los precios, no entienden que esto es una realidad con la que tenemos que vivir”.

Mireya Rojas, quien fue a orar y visitar las tumbas de sus padres, pagó Bs. 9 mil por un ramo de flores, e indicó que era más caro porque tenía rosas. “Aquí deberían cobrar una mensualidad, pero comprometerse a mantenerlo limpio y cuidado. Cuando vinimos, sacamos una bolsa negra llena de basura”.

Por su parte, David Bittar le colocó a la tumba de su esposa e hija un ramo de flores que le salió en Bs. 5 mil. También se quejó de que hay inescrupulosos que se roban los ramos, además de que el cementerio es el peor de todo el país, pues utilizan los pasillos para enterrar a los fallecidos./yg