Tropas del Ejército Nacional, en coordinación con la Policía y la Fiscalía General de la Nación desmantelaron un complejo de laboratorios para procesar pasta base de coca en las veredas Palomas, Raudal y Coposa, del municipio de Valdivia, en el departamento de Antioquia. En total fueron 14 laboratorios destruidos con gran capacidad para producir el alcaloide.
Estas estructuras le dejaban a la Compañía Tarazá, del ELN, unos 1.5 millones de dólares en ganancias al año.
Alrededor de estos laboratorios se evidencia el daño ambiental ocasionado por la deforestación para la siembra de coca, así como la contaminación en el suelo y fuentes hídricas por el vertimiento de químicos y precursores para el procesamiento de la pasta base.