El que fuera anteriormente un importante centro de estudios e investigaciones de la vida marina en Venezuela bajo la tutela de la Universidad de Oriente (UDO), en la actualidad está completamente destruido y desmantelado.
Científicos y docentes trabajaron en este espacio ubicado en el estado Sucre hasta el 2016, año en que las áreas fueron afectadas por el hurto, el vandalismo y el saqueo. Situación que continuó progresivamente hasta la actualidad.
La investigadora Mayré Jiménez informó a medios regionales que «lo que la delincuencia no se pudo robar, fue destruído en su totalidad».