El presidente de Sitravargas, Raúl Yemiñame, asegura que la deserción escolar ya no solo proviene de los casos de violencia, sino de la crisis económica que atraviesa Venezuela en la actualidad.
Los jóvenes a partir de los catorce años están buscando la manera de insertarse en el campo laboral aún teniendo corta edad. Esto se debe a que la mayoría de estos adolescentes provienen de sectores populares donde el ingreso mensual de los padres se hace insuficiente ante los gastos para comida, servicios y medicinas.
Por esta razón, la población estudiantil de los últimos años de bachillerato tienen una tendencia a buscar empleo antes de culminar la formación académica. Esta colectividad no ingresa a las universidades porque está trabajando, bien sea para el sustento de su seno familiar o por embarazos no deseados que los llevan a buscar un empleo para cubrir con los gastos del bebé en camino.
Yemiñame asegura que la deserción escolar también va ligada a la decepción que pueda tener el estudiante durante su periodo de formación. Destaca que las instituciones de manera arbitraria se llevan a los jóvenes a actividades políticas sin el consentimiento de sus padres, haciendo partícipes a los alumnos de estas tareas de índole político donde no deberían estar involucrados. DD/jd